Con esta victoria ante el Vinataus, el Inter Alzira «B», cierra el círculo a la temporada, logrando el título de campeón y el ascenso sin perder un solo partido.
Asistió al encuentro la regidora de deportes del Ayuntamiento de Alzira Sta. Aída Ginestar, que hizo entrega del trofeo de campeones al Inter Alzira RC «B».
Se repitió el guión de las últimas jornadas. Resulta difícil de explicar como tras anunciar dificultades ante rivales complicados (porque así lo habían demostrado en su trayectoria y en los recientes enfrentamientos), llegan los chicos de Ignacio Calabró y hacen que parezca fácil.
Calabró ha conseguido que sus chicos jueguen como una orquesta bien afinada. Si bien los primeros encuentros de temporada resultaron complicados de competir por la poca continuidad del calendario, el equipo fue creciendo paulatinamente, manteniendo una regularidad en su juego francamente difícil de conseguir en cualquier deporte. Es obvio que se ha dejado notar la mano del director de orquesta, que ha hecho que este grupo haya llegado a esta final en su momento más dulce.
En cuanto al partido, al Inter le bastó la primera parte para zanjar el resultado, en la segunda se limitó a administrar la renta y a contener los intentos del Vinataus por meterse en el partido aunque, finalmente solo consiguieron maquillar el marcador que al descanso era de 41 a 6.
Una vez más el equipo salió metido en faena desde el minuto uno, tanto es así que en ese minuto consiguió el primer ensayo por medio de Miguel Ángel Mafe, que transformado por Selma era un 7 a 0 desde el inicio. Se respiraba concentración en el equipo, se mascaba la tensión, era la final y se respetaba al Vinataus. Poco después, en el nueve, Selma transformaba un golpe de castigo, 10-0. La presión interista mantenía a los visitantes encerrados en su campo del que apenas conseguían salir y cuando lo hicieron, arrancaron un par de golpes de castigo de los que vivieron en los primeros veinte minutos, primero con un 10 a 3 contestado por un ensayo de Joseph Hughes 15-3, y luego en el veintitrés 15 a 6. Esos fueron los marcadores más ajustados que vieron los visitantes porque desde ahí, empezaron a caer ensayos de los locales Vicent Gómez, Darío Ferrer, Adriá Castelló y Álex Palop que, con la guinda de las trasformaciones de Carlos Selma dejaban el marcador ya comentado de 41 a 6 al descanso.
En el segundo tiempo Jordi Reverter que ya había transformado dos golpes de castigo en el primer tiempo, ensayaba para el Vinataus, era el minuto sesenta y dos, en el setenta y cuatro un nuevo de los visitantes por Maxime Viala y otra vez transformado por Reverter, maquillaba el resultado final con un 41 a 18.
Se podría caer en la tentación de nombrar a algunos destacados en el encuentro pero el sábado, fue el equipo el que estuvo a la altura, durante la semana se trabajó con ahínco para esta final y lo cierto es que todos y cada uno de los chicos que saltaron al terreno de juego interpretaron a la perfección ese trabajo.
Inter Alzira RC «B» 41: David Ferrer (64′ Jose Carrasquer), Javier Vicent (Capitán) (64′ Ricardo Fernández), José Alfonso Garrigós, Catalin Ionut, Luis Dolz, Vicent Gómez (75′ Metevos Balumyan), Adriá Castelló, Darío Ferrer, Hector March, Carlos Selma, Joseph Hughes (52′ Kevin Jaime), Marcèl Gil (74′ David Pérez), Rafael de la Torre (70′ Julio Cano), Álex Palop (52′ Alexandre Sancasto) y Miguel Ángel Mafe.
Vinataus 18: Oscar Ferré (4′ Claudio César) (63′ Daniel Marius), Eduard Montañés, Manuel Bejarano (Capitán) (74′ Manolo Raya), Arturo Beltrán (41′ Rafael Castejón), Alexandre Vidal (63′ Lucas Gazziro), Pablo Viala, Manel Gavaldá, Levente Dodo, Casimiro Mascarell (64′ Damian Ionut), Alexandre Chaumerliac (41′ Cristopher Lagos), Jordi Reverter, Pau Montañana, Kevin Gil, (59′ Agustí calafell) Daniel Fernández y Máxime Viala.
Fotos: Vicente Camarena