RUTH TOMÀS | XÀTIVA Los vecinos de la calle Ànimes viven un infierno desde hace más de dos años. Según han denunciado, una vecina que padece problemas mentales les amenaza y acosa, crea problemas de convivencia y atemoriza a los niños, que no pueden salir solos a la calle. Al parecer, la mujer sufre un trastorno mental por el que está medicada, aunque sin un control exhaustivo, y ello provoca que no siga el tratamiento correctamente ocasionando «malestar» entre el vecindario. Los residentes denuncian «amenazas» y «acoso» de esta vecina, que ha llegado a agredirles, pincharles las ruedas de los coches, tirarles piedras, macetas y ladrillos, y amenazarles con quemar las viviendas, según explican a este diario los vecinos.
Los residentes de la calle del casco histórico de Xàtiva alertan del estado de «intranquilidad y nerviosismo» en el que viven por los problemas de convivencia con la vecina, que también amenaza a los niños, que no pueden jugar en la calle ni salir solos y que, incluso, tiene una orden de alejamiento verbal con un menor, aseguran unos afectados. El vecindario ha denunciado el problema a los Servicios Sociales del ayuntamiento y en la policía. El caso también ha llegado a los juzgados, ya que los vecinos han interpuesto demandas ante el juez pidiendo soluciones. Exponen que «hemos celebrados unos quince juicios», pero el problema siguen pendiente.
Las resoluciones judiciales han permitido que se interne a la mujer en psiquiatría varias veces, pero cuando ésta es controlada y estabilizada regresa a casa y continuan las amenazas, aseguran. Los vecinos piden que se la ingrese de forma permanente en un centro psiquiátrico, donde pueda estar atendida y ellos puedan recuperar «la tranquilidad. Lo que estamos viviendo no es vida, así no se puede vivir. Queremos soluciones, que la internen y que podamos vivir todos en paz», reclaman.
Medidas de Servicios Sociales
Desde Servicios Sociales del Ayuntamiento de Xàtiva están actuando para buscar soluciones. La concejala de Benestar Social, Xelo Angulo, explicó ayer que «estamos pendientes del caso y estamos actuando en la medida de nuestras posibilidades». Angulo expuso que la mujer tenía a su madre a su cargo y que la anciana «estaba en un estado de desprotección». «Primero hemos actuado para ingresar en una residencia a la madre, de la que ella dependía, y tenemos un expediente abierto del caso, pero no podemos actuar si no hay una orden judicial y si no se la declara incapacitada», señalaba la concejala. Angulo también puso de manifiesto que «estamos trabajando de manera coordinada con la Policía Local y Nacional» y aseguró que «una patrulla pasa todos los días por la calle para controlar, por orden directa del alcalde». La edil concluyó que «no nos hemos desentendido del problema desde que tenemos conocimiento del mismo, pero es un proceso lento» y la misma edil ha llegado a visitar a la vecina con problemas mentales. Desde Servicios Sociales expusieron que «incapacitar a alguien no es tan sencillo, y no depende de nosotros», pero insistieron en que «somos conscientes del problema y estamos actuando», aseguraron ayer.