Un tambor de freno es un componente de un sistema de freno de tambor que se utiliza en los vehículos para reducir la velocidad o detener la rotación de las ruedas. Por lo general, está hecho de hierro fundido o acero y está unido al cubo de la rueda.
El sistema de freno de tambor consta de varios componentes, incluidas las zapatas de freno, los cilindros de rueda y el tambor de freno. Cuando se presiona el pedal del freno, se aplica presión hidráulica a los cilindros de las ruedas, lo que hace que las zapatas del freno se expandan y presionen contra la superficie interna del tambor del freno. Esta fricción entre las zapatas de freno y el tambor genera la fuerza de frenado, que ralentiza o detiene la rotación de la rueda.
Imagen de tambores de freno tomada de www.recambioscoche.es
Con el tiempo, los tambores de freno pueden desgastarse o dañarse debido al calor, la fricción y el desgaste general. Cuando esto sucede, es posible que deban repararse o reemplazarse para mantener un rendimiento de frenado adecuado.
La reparación del tambor de freno generalmente implica evaluar la condición del tambor y realizar el mantenimiento necesario o las acciones correctivas para restaurar su funcionalidad. Estos son algunos procedimientos comunes de reparación del tambor de freno:
- Inspección: Se realiza una inspección visual para identificar cualquier signo visible de desgaste, daño o deformación. Esto incluye la verificación de grietas, ranuras profundas, desgaste desigual o decoloración por calor excesivo.
- Medición: Las dimensiones del tambor se miden con herramientas especializadas para determinar si se encuentra dentro de las tolerancias aceptables. Esto incluye verificar el diámetro del tambor, la falta de redondez y el grosor del tambor.
- Reparación: si el tambor está ligeramente desgastado o tiene irregularidades en la superficie, a menudo se puede reparar. La renovación de la superficie consiste en eliminar una pequeña cantidad de material de la superficie interna del tambor para crear una superficie de frenado uniforme y uniforme. Esto se puede hacer usando un torno u otro equipo especializado de repavimentación.
- Mecanizado: En los casos en que el tambor esté severamente desgastado, dañado o fuera de forma redonda, puede ser necesario el mecanizado. El mecanizado implica eliminar una mayor cantidad de material para restaurar el tambor a sus dimensiones adecuadas. Sin embargo, existen límites en cuanto a la cantidad de tambor que se puede mecanizar y, si excede esos límites, es posible que sea necesario reemplazarlo.
- Reemplazo de zapatas de freno: Si bien no está directamente relacionado con la reparación del tambor, es importante inspeccionar y reemplazar las zapatas de freno según sea necesario durante el mantenimiento del tambor. Las zapatas de freno desgastadas o dañadas pueden afectar el rendimiento y la longevidad del tambor.
- Limpieza y lubricación: durante el proceso de reparación, el tambor debe limpiarse a fondo para eliminar los residuos, el óxido o los contaminantes. Además, las superficies de contacto entre el tambor y las zapatas de freno deben lubricarse con grasa para frenos de alta temperatura para garantizar un funcionamiento suave.
Es importante tener en cuenta que la reparación del tambor de freno debe ser realizada por un mecánico calificado o en un centro de servicio automotriz acreditado. Tienen la experiencia y las herramientas adecuadas para evaluar con precisión el estado del tambor y realizar las reparaciones necesarias para garantizar un rendimiento de frenado seguro y fiable.