El Derbi de la Comunidad Valenciana fue el primer partido de La Liga de la jornada 26, en el que el Valencia recibió al Villarreal en Mestalla el viernes por la noche. A pesar de disputar los octavos de final de la Liga de Campeones en la temporada 2019/20, los locales no han logrado alcanzar esas posiciones esta temporada. De hecho, ni siquiera fueron favoritos en las cuotas de apuestas deportivas para este partido.
El Villarreal tuvo un buen comienzo de campaña, pero lo positivo se ha desvanecido ya que los hombres de Unai Emery no han ganado ningún partido de liga desde enero. Incluso después de que Gerard Moreno marcara un penalti en la primera parte para ponerlos en ventaja, no lograron sumar ningún punto tras encajar dos goles en los últimos minutos.
Varios cambios en las alineaciones de los equipos
Ambos equipos jugaron con un 4-4-2, por lo que fue interesante ver cómo sus entrenadores adaptaron sus tácticas a la calidad de los jugadores. Sin embargo, cada equipo atacó de una manera distinta pese a jugar con la misma formación sobre el campo. El ex entrenador del Watford, Javi Gracia, hizo un par de cambios en su equipo después de la derrota por 3-0 ante el Getafe en la última jornada.
La pareja de centrales tuvo que ser modificada al estar Diakhaby sancionado, por lo que Hugo Guillamón formó pareja con Gabriel Paulista. Álex Blanco sustituyó a Yunus Musah en la banda izquierda, y el resto del equipo no varió respecto al último partido de liga. A esto había que sumarle las bajas de varios miembros del cuerpo técnico al tener Covid-19 y haber sido detectados a tiempo para evitar el contagio a otros miembros de la plantilla.
Por otro lado, la alineación inicial del Villarreal también sufrió un par de cambios con respecto a su último partido de liga: Alfonso Pedraza fue sustituido por Pervis Estupiñán en el lateral izquierdo, mientras que el ex delantero del Borussia Dortmund, Paco Alcácer, regresó a la alineación titular, mandando al banquillo a Manu Trigueros.
Buena primera parte de los visitantes
En la primera parte del encuentro, disputado sin aficionados en el estadio, el objetivo principal del Villarreal era encontrar a Parejo como jugador libre para hacer avanzar el balón. Por su parte, Capoue tiene menos capacidad de pase, por lo que se centró principalmente en ayudar a la defensa para evitar contraataques.
El Valencia podría haber sido más agresivo a la hora de atacar el balón y obligar a jugarlo donde ellos querían. Maxi Gómez se limitó a mantener su posición para intentar cortar línea de pase, pero eso no ocurrió porque el Valencia no presionaba lo suficiente la salida de balón.
Dado que el trabajo principal de Kang-in Lee era cortar a los centrales como opción de pase en lugar de defender los espacios, Capoue podía absorber la presión del centro del campo rival. Parejo quedaba libre en gran parte de las jugadas, consiguiendo crear todo tipo de ocasiones para su equipo. El Valencia no pudo poner en aprietos a los dos centrocampistas en la presión ya que Gerard Moreno se retiró de la línea de ataque, por lo que Carlos Soler o Uroš Račić tuvieron que permanecer más profundos para marcarlo.
Reacción a tiempo del Valencia para llevarse los tres puntos
Gayà fue el gran protagonista del encuentro para el conjunto local ya que estuvo más activo en campo contrario que en el propio. Javi Gracia quería que participara más en la segunda y tercera fase del campo, olvidándose completamente de la salida de balón desde atrás.
Aunque sobre el papel jugaba como delantero de un 4-4-2, Lee era más bien un centrocampista ofensivo que se dejaba caer en profundidad para conectar las jugadas con la punta de ataque. Los centrales del Villarreal no fueron competentes a la hora de defender los espacios en la frontal, por lo que dieron al rival algunos espacios para desarrollar sus jugadas. De hecho, los dos goles llegaron de esa manera y dieron los tres puntos al Valencia.
Maxi Gómez podía recibir y girar ya que los centrales del Villarreal no defendían bien los espacios por delante. Gayà solía estar solo en gran parte de las jugadas ya que aprovechaba para desmarcarse cuando las jugadas tenían en lugar en la otra parte del campo.
Gracias a este triunfo, el Valencia pudo olvidar la derrota ante el Villarreal en la primera vuelta y se aleja de los fantasmas del descenso al tener ocho puntos de ventaja sobre el Eibar. Pensar en puestos europeos es una utopía, pero al menos el equipo está consiguiendo tener un papel decente tras las numerosas bajas que sufrió la plantilla en el mercado de fichajes pasado.